La tintura madre floral es la materia prima de base con la que se preparan cada una de las esencias florales, a partir de los dos métodos de elaboración existentes y que fueran utilizados por el mismo Dr. Edward Bach.
En lo que hace a los requisitos para la elaboración de estas esencias, cabe señalar que primeramente el elaborador debe localizar un área aislada de los ámbitos urbanos, verificar que la zona no tenga contaminación aérea por fumigación o polución —contaminación ambiental—, que la tierra carezca de contaminantes químicos y que dicha zona no se encuentre cerca de fábricas que desechan residuos tóxicos en aguas y tierras aledañas. Dado que el elaborador debe tener conocimientos de botánica, éste debe ubicar el lugar geográfico donde la flora que está buscando, crezca de modo silvestre y asegurarse también, de que ese asentamiento vegetal lleve, por lo menos, más de siete años de desarrollo salvaje, ya que la tintura madre no debe ser extraída de plantas de cultivo o invernaderos. También debe ser un hábil conocedor del tiempo de floración de la especie buscada.
La especie floral puede provenir de un árbol, de un matorral, de un arbusto o simplemente encontrarse esparcida en el suelo y creciendo libremente. El elaborador debe seleccionar las flores en su punto de polinización perfecto, ya que esto es indispensable para lograr un correcto resultado.
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